¿Qué es el pensamiento mágico?
Si reviso los enchufes de mi casa evitaré que una chispa pueda provocar un incendio.
Si reviso las ventanas de mi casa antes de marchar (y están cerradas), evitaré un robo.
Si me lavo las manos al llegar a casa evitaré contaminar mis objetos personales.
Si cierro la puerta y toco las llaves después de hacerlo, evitaré que roben en mi casa.
Si toco la puerta de mi casa tres veces antes de entrar, no me pasará nada malo.
Si pienso algo positivo antes de dormir, mi familia no morirá.
Si parpadeo dos veces seguidas ante un mal suceso, no se volverá a repetir.

¿Qué pasa si tengo pensamiento mágico?
Si no reviso los enchufes de mi casa seguramente se producirá un incendio.
Si no reviso las ventanas de mi casa antes de salir, es muy probable que me roben.
Si no me lavo las manos al llegar a casa, todo lo que haya tocado estando fuera va a manchar mis objetos personales.
Si cierro la puerta pero no toco las llaves después de hacerlo, podrían entrar a robar en mi casa.
Si sólo toco la puerta de mi casa dos veces al entrar, hay más posibilidades de que algo malo me ocurra.
Si no soy capaz de pensar en nada bueno antes de dormir, posiblemente alguien de mi familia morirá.
Si se me olvida parpadear dos veces ante un mal suceso, provocaré que vuelva a suceder.

¿Qué hay de mágico en el pensamiento mágico?
Si no reviso los enchufes de mi casa es improbable que se produzca un incendio, y si se produjera, podría suceder aunque los hubiera revisado.
Si no reviso que todas las ventanas estén cerradas, podría olvidarme alguna abierta, y a lo mejor me entran moscas.
Si no me lavo las manos al llegar a casa, no pasará nada.
Si no toco las llaves después de cerrar la puerta, no influye en nada.
Si no toco la puerta dos o tres veces entes de entrar en casa, me ahorraré unos segundos de tiempo.
Si pienso algo malo antes de dormir, no pasará absolutamente nada, al igual que si pienso algo bueno.
Si no parpadeo ante un mal suceso, nada cambiará, porque yo no puedo evitar que pasen las cosas parpadeando.